Gracias, muchísimas gracias por vuestra hospitalidad, por "cuidar" de mí cuando Rafa no estaba, por vuestros besos, por vuestros abrazos... Mil gracias, porque el calor de la amistad es más fuerte cuando estás a 20.000 kilómetros de tu casa.
P.D.: Mil perdones a Eric, Susana y Javi por no poder despedirme físicamente de ellos. 39 grados de fiebre y un sospechoso temblor de piernas me lo impidió. Queda pendiente la despedida...
Gracias a tí. Si vuelves por aquí alguna vez, aunque Rafa esté ya asentado en su amada Bruselas (je, je), ya sabes que tienes dos casas: la de Eva y la mía.
Cuidaremos a tu talismán ... aunque creo que más bien hasta ahora ha sido al revés.
Quién sabe. La vida da muchas vueltas y mi experiencia en las antípodas ha sido tan grata que no me importaría volver a repetir.
Aparte, ya sabéis que si alguna vez os apatece acercaros a esa ciudad en la que hace tanto calor, que diría tu padre, tenéis un guía turístico, un hogar, litros de salmorejo y de cerveza. Eso sí, de cerveza Alhambra...
2 comentarios:
Hola Alfonso:
Gracias a tí. Si vuelves por aquí alguna vez, aunque Rafa esté ya asentado en su amada Bruselas (je, je), ya sabes que tienes dos casas: la de Eva y la mía.
Cuidaremos a tu talismán ... aunque creo que más bien hasta ahora ha sido al revés.
Veremos si me veta o no cuando regrese de Fiji.
Bicos
Un besiño Laura.
Quién sabe. La vida da muchas vueltas y mi experiencia en las antípodas ha sido tan grata que no me importaría volver a repetir.
Aparte, ya sabéis que si alguna vez os apatece acercaros a esa ciudad en la que hace tanto calor, que diría tu padre, tenéis un guía turístico, un hogar, litros de salmorejo y de cerveza. Eso sí, de cerveza Alhambra...
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