martes, 10 de abril de 2007

El procesionódromo


Radical. Ésta es la pesada cruz en forma de atributo que tengo que cargar por las calles de Córdoba, las mismas calles de las que cuelgan carteles como el de la izquierda (juro que leerlo con 15 años me habría producido poco menos que un erizamiento de todo el vello de mi cuerpo en forma de satisfacción), y calles, decía, en las que ha comenzado a surgir una curiosa reivindicación ciudadana: la creación de un procesionódromo en El Arenal. Sólo tienen un lema: "Pasos fuera de la Judería", pero les falta acción.
Ah --nótese la interjección irónica--, cuán evocadoras imágenes de juventud radical me vienen a la mente y qué cerca estuvimos de constituir aquel notable Comando Vuelcapasos, cuyo brazo político sería Radikales del Sur. Habíamos redactado ya un primer borrador de sus estatutos y habíamos trazados nuestras primeras acciones: la introducción de un costalero bomba y la acción conjunta de un varal entero de costaleros de alzar la procesión unos dos metros más de lo habitual al grito de "Ar sielo con ella" con el único objetivo de volcar el trono y darnos a la fuga.
¡Ah!, y pensar que me llamaban radical sin motivos.
P.D.: Sé que el cartel es de 2006, pero sólo lo recojo para que observéis en qué local se organiza la charla.

No hay comentarios: