"Este contigo, este sin ti tan amargo,
este reloj de arena del arenal,
esta huelga de besos, este letargo,
estos pantalones largos para el viejo Peter Pan".
Joaquín Sabina. Cerrado por derribo. 19 días y 500 noches.
40 minutos. Fue el tiempo que tardó Sabina en conquistar las Caballerizas Reales (para un republicano) de Córdoba y el título con el que inauguraba la cuarta edición de Cosmopoética, la cita más importante de la poesía en España y que acoge la ciudad califal.
Los que me conocéis, sabéis lo que han marcado mi vida las letras del cantautor de Úbeda. Llevaba siglos sin escucharlo, sin poner sus discos, sin leer sus poemas y sin tararear sus letras. Pero fue un Jueves Santo cuando tras hacer la foto que ilustra el post anterior me alcanzó ese revival del que me hablaba Bruno este fin de semana.
Hace dos días busqué en los confines de mi coche y desempolvé sus discos. Ahora, sus canciones me sonaban más cerca, tan cerca como anoche en las Caballerizas Reales o durante un paseo vespertino (es imposible ver a Sabina en la calle antes de las cuatro de la tarde) por las calles de Córdoba, por mi Calle Melancolía.
"Este borrón de sangre y de tinta china,
este baño sin rimmel ni nembutal,
estos huesos que vuelven de la oficina,
dentro de una gabardina
con manchas de soledad"
2 comentarios:
che bello!
Es bonito, es bonito (con la boca chica)
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